Precioso monticulo de carne placentera/ofrecéme esa abertura bestial/la que me lleva a conversar con dios/mientras derramo un inservible torrente de leche en su interior/nada iguala la dulzura de un orto agitandose en la cara/una fruta dulce/que merece mil lamidas de lenguas satiras/divino culo de hembra/iluminás el dia/sos como un sol tibio de otoño/ese candido sepulcro/donde descansan las vergas erectas/posees el perfume virginal que se inhala en ensueños/el efecto fantasmal de la cocaina mas pura/dejá que penetre hasta el fondo en tu carne rosada/acumáme/veamos llegar a la muerte y al orgasmo ////// A. Aguirre
No hay comentarios:
Publicar un comentario